¿Qué hacías el 25 de enero de 2005?
El 25 de enero de 2005 era martes.
Un martes de verano, finales del mes fantasma, calor y humedad en Buenos Aires.
El martes 25 de enero de 2005 los diarios ponían en su tapa que una jueza había inhibido los bienes del jefe de gobierno porteño Aníbal Ibarra por el caso Cromañon; que David Nalbandian le había ganado a Guillermo Coria en el abierto de Australia y que León Ferrari había decidido levantar su muestra plástica en el Centro Cultural Recoleta por las amenazas vertidas por sectores ultracatólicos.
Por aquel tiempo, el presidente era Néstor Kirchner; el Papa Juan Pablo II; Riquelme jugaba en el Villarreal de España y un argentino se convertía en el jugador mas joven en debutar en el Barcelona de España. Tenía 16 años y su nombre: Lionel Andrés Messi.
Ahora cerrá los ojos y pensá por un minuto todas las cosas que pasaron en tu vida desde el 25 de enero de 2005.
Los recitales que viste, los viajes que realizaste, los amores y desamores, el tiempo dedicado a estudiar o a machetearte, las entrevistas de trabajo, las borracheras con amigos, los familiares que ya no están, la computadora que tenias, los walkman donde escuchabas las canciones que te emocionaban, las fotos que se fueron poniendo amarillas.
Pensá por un minuto todas las cosas que pasaron por tu vida en estos siete años.
El 25 de enero de 2005 Fernando Ariel Carrera, un joven comerciante de 30 años, sin antecedentes penales, casado y con tres hijos, se encontraba en su auto a pocos metros del Puente Alsina, esperando que el semáforo le diera luz verde para cruzar desde Pompeya a Lanús.
Al mismo tiempo, policías de la Comisaría 34 buscaban a tres ladrones en un auto blanco –ese era el único dato que tenían– que en la zona habían realizado dos robos.
Al ver el Peugeot 205 blanco de Carrera, los policías, dispuestos a detenerlo, se dirigieron hacia él a bordo de un auto sin sirena ni insignia alguna que los identificara como de la Policía Federal.
Lo que Carrera ve es un auto acercándose a toda velocidad con uno de sus integrantes –desaliñado, con pelo largo y barba– con medio cuerpo fuera de la ventanilla y blandiendo un arma de fuego. Temiendo ser asaltado, Carrera acelera y dobla hacia Capital. Pero ya es demasiado tarde.
El policía dispara y el impacto le da de lleno en la mandíbula, dejándolo inconciente.
Sin embargo, Carrera sigue manejando por automatismo y a bordo de su auto recorre 500 metros, atravesando la Avenida Sáenz.
En el trayecto el Peugeot atropella y mata a tres personas –dos mujeres y un niño de seis años– y termina chocando contra una camioneta frente a la Iglesia de Pompeya.
Los policías se bajan del auto, forman un abanico y disparan sobre Carrera. Desde el puente y hasta estos disparos finales, los efectivos policiales dispararon dieciocho veces contra Fernando Carrera. Ocho de esos disparos impactaron en su cuerpo.
Al final del día los medios habían bautizado el caso como “La Masacre de Pompeya”.
El dia siguiente, el diario Clarin pondría en su tapa el caso, con una fotografía que ilustraría el centro del periódico. Debajo, el título: “Una fuga brutal y tres muertes.” En la nota, el periodista fijó los hechos y dictó sentencia de la siguiente manera: “Cuando (Carrera) vio que había policías por todos lados pisó el acelerador a fondo sin medir las consecuencias de ir a más de 100 kilómetros por hora, de contramano, y por una avenida muy transitada. Pasó un semáforo en rojo y cuando iba a cruzar otro más atropelló a varias personas. Luego chocó contra un utilitario, se tiroteó con los policías que lo perseguían y quedó gravemente herido”.
El 7 de junio de 2007 Fernando Ariel Carrera fue condenado a 30 años de prisión. Permaneció detenido en el penal de Marcos Paz.
En diciembre de 2009, Nora Cortiñas, Adolfo Pérez Esquivel y Enrique Piñeyro se presentaron ante la Corte Suprema de Justicia bajo la figura de Amicus Curiae (Amigos del Tribunal) adjuntando a la presentación el video que mostraba las incontables irregularidades del expediente. El video es la película-documental llamada “Rati Horror Show”.
El 5 de junio de 2012, la Corte Suprema de Justicia de la Nación hizo lugar al pedido de revisión de la sentencia presentado por la defensa de Carrera por entender que el fallo condenatorio "carece de la debida fundamentación", por lo cual remitió el expediente al tribunal de origen y solicitó que se "dicte el nuevo fallo". El voto del juez Zaffaroni pone en evidencia que la causa fue armada por la Policía Federal
Fernando Carrera recuperó su libertad el miércoles 6 de junio de 2012.
Pasó detenido 7 años y cinco meses por un crimen que no cometió.
Cuando te digan que los delincuentes no deben ser excarcelados durante el proceso, recordales que nadie puede ser penado sin un juicio previo y que estar preso siempre es una forma de castigo, que arruina vínculos y vidas.
Cuando te digan que los delincuentes entran por una puerta y salen por la otra, recordales que todos somos inocentes antes que se demuestre lo contrario, mediante una sentencia firme que declare la culpabilidad.
Cuando te digan que las garantías son sólo para los delincuentes, recordá el caso de Fernando Carrera.
Y recordá qué hiciste los últimos siete años y medio de tu vida.
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