Defender, hablar en favor de alguien.
Nosotros abogamos desde nuestro primer programa por una prisión sin muros, una policía sin gatillo y una justicia sin venda. Abogamos por la plena vigencia de los derechos económicos, sociales, y culturales, y del respeto a los Derechos Humanos. Abogamos en favor del castigo al Gatillo Fácil, en contra de la criminalización del diferente.
Elegimos de qué lado del mostrador nos queremos parar. Y para llegar a ese “alguien” en favor de quien hablar discutimos, estudiamos, escribimos, nos organizamos. Nos metemos y nos comprometemos.
Porque de eso se trata. De comprometernos más allá de lo individual, de entender el carácter político de la elección que significa ese “alguien” que defendemos.
Y para que ese compromiso y entendimiento sean posibles, es necesario tener la posibilidad de problematizar esas cuestiones, preguntarnos acerca de qué significa el derecho, qué relaciones sociales expresa, qué intereses defiende.
Y para poder hacernos esa pregunta necesitamos que quien nos forma nos la presente, nos interpele.
Y como esa formación nos la brindó la Universidad Pública, podemos preguntarle hoy ¿Para qué forma abogados la Universidad Pública? ¿Abogados para qué?
Hoy, como desde nuestro primer programa, abogamos por una formación sustentada en espacios de ejercicio crítico que permitan sedimentar las bases para un saber que discierna, interprete y relacione. Saber que se acerque a los conflictos, que establezca criterios, valores, y posiciones. Un saber que abra perspectivas, un saber que pueda.
Saber que pueda, eje de una formación que no forme conformistas, sino agentes libres, críticos, solidarios y comprometidos.
Formación que nos brinde menos mediáticos y chicaneros, y más defensores de derechos humanos, de trabajadores, de la libertad.
En un día como hoy saludamos a los abogados como Deodoro Roca, Rodolfo Ortega Peña, Manuel Belgrano, Leon “Toto” Zimmerman, y a tantos otros y otras que hacen su profesión un compromiso permanente con la construcción de una sociedad libre, educada, solidaria. A todos ellos, a todos nosotros: Feliz Día del Abogado
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